La Real Federación Española de Automovilismo está iniciando durante esta temporada del año 2023 un camino, decidido y sin retorno, hacia la implantación de una herramienta tecnológica que permita el cálculo de la huella de carbono, tanto de la entidad como de los diferentes eventos que componen los certámenes nacionales convocados por la RFEDA. Es el primer paso, sin duda, para la consecución del objetivo asumido de la reducción paulatina en la emisión de gases de efecto invernadero inherente a la práctica del deporte del automóvil y, más concretamente, en las diferentes carreras que componen el calendario nacional.
Para este objetivo, la RFEDA, que cuenta con el apoyo del Real Automóvil Club de España y el soporte técnico de NTT Data, necesita del concurso y colaboración necesaria de los principales colectivos que intervienen en la organización de cualquier evento automovilístico. Entre ellos destaca el de los equipos y pilotos participantes que, con las encuestas de movilidad que desde hace unas semanas ya están recibiendo, conformarán con la información suministrada buena parte de la huella de carbono del evento en cuestión. Clubes organizadores, principales proveedores de la carrera y personal de la propia RFEDA, o designado por ella, desplazado a la prueba completan ese listado de grupos de interés que, con su participación en el proyecto aportando sus respectivas informaciones, posibilitan la medición de la huella de carbono de un evento y, por extensión, de un campeonato.
Es el primer paso, sin duda necesario, para, a partir de las mediciones realizadas y de una serie de “tips” sencillos y fáciles de implementar, cuando el objetivo del proyecto se extenderá hacia la progresiva reducción de la cantidad de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Estableciendo criterios ambientalmente sostenibles, con actuaciones que trabajen la economía circular y la gestión de las emisiones de carbono asociadas a cada evento se está trabajando en la viabilidad futura, no tan a largo plazo como pueda parecer, de nuestro deporte.
En este sentido, Manuel Aviñó, como presidente de la RFEDA, indicó que: “Estamos iniciando uno de los proyectos más ilusionantes de los últimos años. Nuestro compromiso es total y solicitamos a todo el ecosistema que conforma nuestro deporte la máxima colaboración para que, con un pequeño esfuerzo individual de mucha gente, podamos conseguir la mejor información y, por tanto, la mejor medición de la huella de carbono de nuestros eventos. Sin duda, es el mejor y más necesario primer paso para reducir y, en su momento, compensar más pronto que tarde a la neutralización de la huella de carbono de nuestra actividad”.
Con #MenosEmisionesMismasEmociones, desde la RFEDA se transmite el mensaje de que, sin alterar la esencia de nuestro deporte y con la involucración de todo el colectivo, se pueden conseguir resultados muy evidentes, transcendentes y beneficiosos para todos.